Hola Kiwito, veo que otra vez estás aquí, me alegra mucho tenerte para charlar. Tengo entendido que tú procedes del Rastro Madrileño, ¿No es así?
-Sí, así es. Estaba en una caja de cartón, era un perro muy pequeño, estaba con otros que eran mis hermanos, pero afortunadamente me eligieron a mí. Digo esto porque se ocupan de mí, me quieren y Gracias a Dios, son responsables.
_¿Por qué dices eso, Kiwi?
_Bueno ya sabes a que me refiero, cuando somos cachorros, somos preciosos, pero luego,  si crecemos mucho no cabemos en la casa y……llega el verano, las vacaciones…. y el abandono de los perros.
-Bueno, bueno, no sigas, déjalo, porque creo que llevas viviendo con tu familia trece años, ¿verdad?.
-Si Lucas, hace mucho que estoy allí feliz de la vida. Cuando yo llegué los niños eran adolescentes y yo cachorro, te puedes imaginar cómo lo pasaba. Ahora alguno vive ya fuera de casa y cuando viene me vuelvo loco de alegría. Cómo verás soy un perro afortunado, y tú, ¿de qué lugar procedes?.
_Mis orígenes son humildes, nací en una granja donde había cerdos, gallinas, conejos, gatos y un rebaño de ovejas a cuyo cuidado estaba mi madre, una perra carea autóctona de los Montes de Toledo. Tú por lo menos estabas en una caja de cartón, pero mis hermanos y yo estábamos debajo de una puerta de hierro que apoyaba en una encina, sobre un lecho de hojas secas, paja y pelo de mi madre que calentaba mucho. No creas que el dueño de la granja nos trataba mal, era buena persona, pero la vida del campo es muy dura. Otro día te contaré con más detalle cómo llegaron a por mí afortunadamente.
Dime ¿qué opinas de aquellos perros que viven en albergues de acogida?.
_Bien, cada vez están más concienciados los humanos, de que el abandono es una crueldad y es mejor acudir a estos centros, donde llegarán otros dueños en busca de algún perro ansioso de su cariño. A cambio recibirá toda la lealtad que nadie jamás le podrá brindar. Pero queda mucho por hacer, ¿no crees Lucas?

cachorro recien nacido

_Hay que dar tiempo al tiempo y tener esperanza en los niños que tenemos o hemos tenido en nuestras familias humanas, ellos habrán aprendido a tratarnos con dignidad y respeto de sus mayores, y mañana enseñarán a sus hijos, y éstos a los suyos….Tengo entendido que mi dueña tuvo una gran maestra en su casa, enseñó a sus hijos a no maltratar a los animales, ni tan siquiera una simple hormiga, cada uno cumple su función.¡ Qué pena yo la conocí muy poco!

  Por cierto, no quiero ser descortés, tengo unas rosquillitas por aquí que me chiflan, ¿te apetece una?, están de muerte. Mi veterinario dice que no debemos comer entre horas, ya sabes los dientes……, pero ahora no nos ve nadie.

 

 firma lucas