La raza Chihuahua comparte nombre con un estado de México, pero ¿proceden de allí? No exactamente. El origen del actual Chihuahua está en las culturas tolteca y azteca. Estas poseían perros pequeños llamados “techichi” y a los que daban una gran importancia, puesto que solo los tenía la gente adinerada y hasta se les incineraba con ellos.

Se cree que el Chihuahua es una mezcla del antiguo techichi y un perro aún más pequeño y sin pelo procedente de Asia. Más tarde, el Chihuahua moderno llegaría al estado de México del que procede su nombre y se exportaría a Estados Unidos. Supuestamente, esta raza evolucionó al cruzarse con otros perros pequeños de México, Arizona y Texas.

• País de origen: México
• Tamaño: Pequeño
• Peso: 1,5 – 3 kg

Los antiguos Chihuahuas, también llamados techichis, eran las mascotas de la gente adinerada de la época y cuando el dueño fallecía incineraban al perro con él creyendo que el can cargaría con los pecados del difunto y así podría entrar en el más allá sin molestar a los dioses. También se cuenta que guiaban al fallecido por los infiernos y luchaban contra los malos espíritus.

Hay 6 tipos de Chihuahua:

• Chihuahua de cabeza de manzana
• Chihuahua de cabeza de venado o ciervo
• Chihuahua toy
• Chihuahua sin pelo
• Chihuahua de pelo largo
• Chihuahua de pelo corto o liso

Esos 6 tipos son variaciones dentro de la misma raza, pero hay algo que tienen en común y es que son los perros más pequeños que hay y su cabeza tiene forma de manzana.

Los colores van desde el beis al negro, pasando con el canela y también contando con que muchos tienen una pechera de otro color.

El Chihuahua es vivaracho, curioso, inteligente y da mucho afecto, pero no a todo el mundo. Normalmente crea un fuerte vínculo con una o dos personas con las que es un perro dócil, pero no suele aceptar bien a los desconocidos. Con ellos puede mostrarse demasiado nervioso, ladrarlos o, incluso, ponerse agresivo.

Esto se puede remediar con una socialización adecuada hecha desde que es cachorro para que pueda mantener buenas relaciones tanto con personas como con otros perros.

La forma de la cabeza del Chihuahua hace que tiendan a sufrir ciertos trastornos oculares, por lo que un buen control veterinario es muy importante.

Este pequeño perro se adapta a la cantidad de ejercicio que se le ofrezca, siempre con moderación. Suelen ser muy enérgicos y se emocionan mucho al jugar, pero no necesitan paseos largos. También es recomendable pasearlos con arnés en lugar de collar para evitar así problemas con su frágil tráquea.

En cuanto al aseo, son perros muy fáciles. Con un cepillado correcto sería suficiente, aunque también puedes hacer más hincapié en épocas de muda.

Algo a tener en cuenta en el cuidado de los Chihuahuas es que tienden a tener sarro, por lo que es aconsejable cepillarles los dientes a diario para evitar futuros problemas dentales.