¿Cuántas veces has hablado con tu perro y sabes perfectamente que te entiende?.
Muchas verdad, pero sólo lo entiende aquel que tiene perro y convive con él a diario.
Son testigos y participan de tu alegría, de tu pena, tu nostalgia, tratan de calmar tu angustia, nada te puede confortar más que abrazar al que más pendiente está de ti, durante todo el día, tu perro.
Todo este comportamiento de los perros no son locuras de los dueños, es un hecho totalmente cierto y abalado por un estudio que se ha llevado a cabo por un equipo de investigadores de las universidades de Eötvös Loránd y Semmelweis de Budapest (Hungría).
Los perros han sido sometidos a resonancias magnéticas que han descubierto que la capacidad del aprendizaje del vocabulario no es sólo una capacidad de los humanos, si no que es una función que puede ser usada para asociar secuencias de sonido arbitrarias a ciertos significados.
Pero las palabras no son la única forma de comunicar, también la entonación.
El estudio ha demostrado que los perros son capaces de entender lo que decimos y cómo lo decimos.
Pero el estudio va más allá, demuestra que los perros reconocen las palabras independientemente de la entonación.
Según el estudio el perro es capaz de procesar el significado de las palabras, la entonación y si además hay algún tipo de recompensa.
Pero no parece un comportamiento innato, sino más bien aprendido en algún momento a lo largo de la domesticación.
Lo que está claro para cualquiera que tiene un perro es que la comunicación es directa y entienden todo lo que pasa a su alrededor, incluso perciben lo que está por ocurrir.
¡¡¡Quietos, no podéis moveros, estáis mojados!!!!!
Y lo entienden y no se mueven.
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