Hola amigos, me llamo Lucas, soy un perro afortunado que vive en una familia donde me quieren y me cuidan, ¡ahí es nada!. Todas las mañanas doy un largo paseo con mi dueña y me doy cuenta de la suerte que tengo, atienden mis necesidades primarias diarias, entendéis de qué os hablo, ¿verdad?.Sin embargo otros no tienen la misma suerte. Los veo salir del portal de su casa tan apurados que no llegan ni al alcorque del árbol que hay enfrente, les arrastran y regañan.¿ Os imagináis a un humano en esas condiciones?. Resultaría impensable, sin embargo para ellos, a veces es lo normal con su perro, ¡que pena!. ¿Que harían con una persona mayor que también necesita tiempo?.
Otras veces, es la chica que trabaja en la casa la que se encarga de sacarlo, dando tirones, parada hablando por teléfono o simplemente quemada por la tarea encomendada, vamos como si tuviera que pasar la aspiradora, algo más; claro que como es un perro que importa, es un objeto más de la casa.
Otro día olisqueando como siempre, es lo que más me gusta, ¡Dios Mío! a juzgar por lo que estaba viendo, ¿cuanto tiempo debía llevar sin bajar a la calle mi amigo el de la deposición que su dueño no había recogido?. Ahorrando los detalles escatológicos, sólo os diré que casi no podía seguir olisqueando en el mismo sitio, seguía, seguía tanto, que mi dueña me regañó, tenía razón, pero yo pensaba, – éste pobre no podía seguir comiendo, primero tenía que vaciar todo el intestino para volver a comer-.No se quien es, me gustaría conocerle, sobre todo a su dueño, para ver su aspecto quizá atildado incluso. Me gustaría hablar con él, si me entendiese y decirle que el intestino de su perro se daña, desarrolla tumores igual que el suyo, se inflaman las glándulas anales, provoca mucho dolor. Bueno voy a pensar que quizá no lo sabe, debería informarse.
Como sabéis hay adiestradores de perros, somos capaces de aprender a hacer lo que nos enseñan, pero ¿os habéis parado a pensar que a veces alguno de estos malos dueños deberían ser adiestrados para tener perro?. Bueno no dramatizaré, quizá paseo por un lugar donde observo estas peculiaridades por mi manía de olisquear todo, quizá esos dueños no abunden tanto y esto que os cuento no sea lo habitual y se trate sólo de pequeñas anécdotas.
lucas y lola